Tu mundo está lleno de rutinas que lo simplifican, ordenan y ayudan a enfocarte en lo importante. El comenzar tu día en hora, alimentarte, trabajar, hacer ejercicio y demás actividades son tareas que, al realizarlas diariamente, crean hábitos que aportan más tiempo libre a tu vida. Como vos, tu piel también necesita de su propia rutina para lucir mejor, estar hidratada, verse sana y radiante. Realizar cuidados al comenzar tu día y antes de acostarte son esenciales para lograr cambios en tu piel, transformando en un hábito la higiene diaria de tu rostro.
Sobre la palma de la mano colocá la cantidad de crema base que habitualmente usas, agregá entre 3 y 5 gotas del booster que hayas elegido, mezclá y aplicá. ¡Así de sencillo y fácil!
Mirá el video y hacé tu rutina.
Un booster es un sérum muy concentrado en activos puros y sus principales beneficios son:
Antiarrugas: formulado con colágeno, elastina y silicio, corrige líneas de expresión y arrugas.
Regeneración: repara la piel dañada, extremadamente seca o castigada por el clima gracias a la presencia de vitamina A, vitamina E y rosa mosqueta.
Peeling: desarrollada con ácido glicólico, gluconolactona y alfahidroxiácidos, unifica el tono, ilumina, alisa la textura de la piel, reduce poros. Uso por la noche.
Antirrojeces: con manzanilla, cúrcuma y boswellia, activos que poseen acción descongestiva calmando el enrojecimiento y la irritación de la piel. Pensada especialmente para pieles sensibles y con rosácea.
Humectación: ideal para pieles secas, con tirantez y descamación. Fortalece la barrera cutánea para que la humectación permanezca en el interior.